El 27 de
mayo de 2008, durante la era de los aprofaenones de Alan García, un letrerito de menuda letra,
pegado con cinta scotch, en la puerta del Ministerio de Educación en San Borja, indicaba que ese
día sería rematado su edificio. Al interior, en un lugar
desapercibido, el movimiento de público
y empleados aparentaba normalidad en sus labores cotidianas, sin embargo en el ignoto lugar se efectuaba
una superventa con un único
postor, Inversiones San Borja, del Grupo Brescia, amiguísimos del panzón.
Iniciada
la operación, tipo subasta, el solitario representante de los Brescia hizo una
oferta de 13 millones de dólares
para un edificio que había
sido evaluado muy humildemente en apenas 64 millones de dólares. Los mafiosos, es decir los
representantes del gobierno del caco-aprista, dieron por consumada la venta en
tiempo record. Toda ya había
sido arreglado previamente, la Resolución que autorizaba su venta jamás apareció en El Peruano, como debió haber sido, como manda la Ley. El Estado que
representa a todos los peruanos, es un decir, había dejado de ganar al menos 50 millones de dólares con esta nueva faena. ¿Con
cuanto se “mojaría” el
panzón y su combo?
¿Cómo fue?
Aunque
ese es el título de un famoso bolero de Benny
Moré, el cubano de la voz de oro,
esta vez puede ponerle música
a esta historia que se inicia a comienzos del año 2008, cuando aparecieron fuertes denuncias acerca
del remate de los terrenos de las sedes del Ministerio de Educación y de la Presidencia del Consejo de
Ministros. Fue precisamente un enfoque al local del Ministerio de educación que
terminó descuartizado en seis sublocales
en Lima y Callao, trabajando en sótanos y condiciones tugurizantes, con el aval
de todos los apristas y fujimoristas lo que empujó las denuncias. El caso es que también contó con la complacencia de los mismos trabajadores de
la sede, del gremio de los maestros, del mismo Consejo Nacional de Educación
sin excepción, y por último
del director de la Biblioteca Nacional de ese entonces, Hugo Neyra, conocido
por su apodo de saltaperico.
Es
la historia de una enorme desvergüenza en la que Educación fue pisoteada al estilo más
lumpenesco jamás visto en la historia de la República del Perú. No contentos
con haber usufructuado con millones de soles, los malhechores de estas actividades
ilícitas han puesto al descubierto su desprecio por la cultura, la educación,
el magisterio y sobre todo con los niños que han sido testigos de estas fechorías que seguro jamás se les
borrará de su memoria.
Las
cifras no pueden engañar, por encima de la indiferencia de las unidades de
investigación de los medios de comunicación de la radio y TV, de los notables
de la educación de escritorio que, salvo honrosas excepciones, como siempre se
hacen los cojudos. Pero la historia los juzgará, a quienes no hagan un claro
deslinde sobre ese delito de lesa educación.
El
terreno del Ministerio de educación se vendió o remató al estilo Mario Puzo, en
su novela El Padrino, en 13 millones
de dólares, cuando su valor real
es de cerca de 64millones de dólares.
Se defraudó así al Fisco en 50 millones de dólares. ¿Dónde estaba el Presidente
de la República, el Procurador, el Ministerio Público, los notables de la
educación pero de escritorio, el Poder Judicial, el servicio de inteligencia,
la Policía?
¡Es como para matarse de risa!, perdón, ¡o para llorar!
La gente
se pregunta, es así como se trata a la Educación, desde cuando el Ministerio de
educación se entrega a un improvisado, a un logrero mercader. Que hemos hecho
los peruanos para recibir este maltrato injusto.
Chang,
el nefasto ministro de Educación,
que había sido echado de la Universidad Católica por muchos cursos
desaprobados, obtuvo como mafioso nota 20 en aprovechador y mercader fenicio.
Los terrenos del Ministerio de Educación fueron vendidos a solo 520.42 dólares el metro
cuadrado cuando en San Borja cuesta 2,500 dólares el m2.
Por la
PCM, en Miraflores, pagaron solo 1,085.92 dólares el metro cuadrado, cuando el
valor comercial es 2,500 dólares el m2.
La
dupla García-Chang vendió las sedes del Ministerio de Educación y de
la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) a precio “huevo”, con subastas en
tiempo récord, sin estudios técnicso e inclusive con normas que nunca fueron
publicadas en el diario oficial “El Peruano”.
La
exsede del Ministerio de Educación se ubica en una zona residencial
de San Borja y el exlocal de la PCM en la avenida 28 de Julio de
Miraflores, en zonas apetecidas por los constructores de edificios de
departamentos.
El
14 de marzo de 2008, el Ejecutivo promulgó el Decreto Supremo Nº
008-2008-Vivienda mediante el cual se creó el “Proyecto Especial para la
Reubicación de Sedes Institucionales del Poder Ejecutivo”, en el ámbito de la
Superintendencia Nacional de Bienes Estatales (SBN).
Dos
meses después, el 8 de mayo de 2008, se promulgó el decreto legislativo que
dispone el ordenamiento de sedes institucionales de las entidades y organismos
públicos del Ejecutivo.
A PRECIO HUEVO
Increíblemente el precio de venta de los 25,442.50m2 de la exsede del
Ministerio de Educación se fijó en 13 millones
240,865.82 dólares a razón de $520.42 el metro cuadrado, cuando en
esa zona el valor comercial de un metro cuadrado es de 2,500 dólares. Por
tanto, el precio real hubiera alcanzado los 63 millones
606,250.00 dólares. Es decir, en la práctica se perdieron 50 millones
365,384.18dólares.
SUBASTA EN TIEMPO RÉCORD
La
subasta pública de esa sede, realizada por la SBN el 27 de mayo de 2008, se
efectuó en tiempo récord a favor de la empresa Inversiones San
Borja S.A., del grupo Brescia, quienes han financiado la pasada campaña
electoral de Alan García.
La
subasta estaba programada para las diez de la mañana y tan solo tres minutos
después fue adjudicada a esa empresa, extrañamente la única que se presentó ese
día.
Junto
a Inversiones San Borja estaban inscritas las empresas Urbi
Propiedades del grupo Interbank, G y M S.A., Hipermercados Tottus S.A., la
Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), Inmuebles Comerciales
del Perú S.A.C.
CHANG MIENTE
Ante
el Congreso, el entonces ministro de Educación, a la vez socio y cómplice del exmandatario aprista
justificó la venta de la exsede de Educación señalando que no reunía
las condiciones apropiadas para el funcionamiento del ministerio ni para
albergar el crecimiento orgánico del personal derivado de la fusión con
organismo públicos descentralizados y la creación de nuevos programas.
Asimismo,
dijo que luego del terremoto de agosto de 2007 las condiciones
de seguridad de las instalaciones del local ministerial tenían
deficiencias calificadas de riesgo grave y moderado, lo cual fue “constatado”
por el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci). El informe debió ser
colgado en la web del Minedu. Más aun el local del Ministerio de Trabajo que si
fue seriamente dañado por el mismo terremoto, ha sido refaccionado y sigue en
funcionamiento, como si nada hubiera pasado.
Legisladores
de oposición replicaron a Chang que es censurable que se haya vendido la sede
sin tener un local a donde llevar al ministerio y, que, habiéndose anunciado
que existía un terreno y un anteproyecto para la nueva sede, ni siquiera se
hayan exhibido los planos.
Además,
se le preguntó, ¿por qué quedaron nueve meses trabajando en esas condiciones e
hicieron una venta apurada?
Lo
dicho por Chang carece de sustento, pues la exsede poseía grandes y cómodos
ambientes rodeados de jardines y comedores que reunían las mejores condiciones
laborales. A ello se suma el hecho de que el inmueble tenía pocos años, pues
fue construido en 1996.
Por
estas razones, entre otras, no se entiende porqué para la cúpula aprista pesó más el vil metal, porqué
deshacerse de un local con estas características para luego repartir al área
administrativa y logística en cinco diferentes locales ubicados en jirón
Carabaya, la Biblioteca Nacional, el Museo de la Nación, el antiguo local de
Centromín, e inmuebles de las avenidas Venezuela, en Lima, Callao,
Ate y La Molina.
Al
igual como sucedió con el Programa Nacional de Rehabilitación de Colegios
Emblemáticos y Centenarios implementado por la gestión Chang, el extitular
delegó facultades a su secretario general que firmaba resoluciones, decretos,
etc.
NORMA NUNCA PUBLICADA
El 13 de
marzo de 2008, el Ministerio de Educación a cargo de José Antonio
Chang, mediante Resolución Ministerial Nº 0147-2008, encargó a la SBN la ejecución
del procedimiento de venta por subasta pública de la sede ubicada en la calle
Van de Velde 160, en San Borja, con una superficie de 25,442,50 m2.
Esa
resolución, sin embargo, nunca fue publicada en el diario oficial “El Peruano”
como debió suceder de acuerdo a los procedimientos normales.
Sobre
esta norma, tampoco existe referencia en el Sistema Peruano de Información
Jurídica, a cargo del sector Justicia y que sirve de herramienta a todas las
entidades del Estado, incluido el Congreso, y menos aparece en la Biblioteca
del Parlamento, donde se le señala como “norma no publicada”.
NEGOCIADO CON TERRENO DE LA PCM
Otro
escándalo que pinta a cuerpo entero la gestión del quinquenio aprista y que de
todas maneras debe merecer un ejemplar castigo por todos los actos ilícitos que
venimos constatando día a día. En el
caso del local de la PCM, ubicado en una zona exclusiva de Miraflores, la
empresa Playa Paz Soldán se adjudicó los 5,450.54m2 por 5 millones
918,750.98 dólares a razón de 1,085.92 el metro cuadrado, cuando en
esa zona el valor comercial del metro cuadrado es de 2,500.00 dólares. Por
lo tanto, el valor comercial a ese precio arroja un total de 13 millones
626,350.00 dólares, es decir, se perdieron 7 millones
707,599.02 dólares.
De
la misma manera no se entiende la razón de traspasar esta sede al Palacio de
Gobierno donde no existían las comodidades debidas ni la logística requerida.
Como
se recuerda, el expresidente Alan García, a través del decreto de urgencia
004-2009, creó el Programa Nacional de Recuperación de las Instituciones
Públicas Educativas Emblemáticas y Centenarias. Con dicho decreto de urgencia
García autorizó al ministerio de Educación a exonerar el proceso de selección y
a realizar contrataciones de manera directa, que en otras palabras quiere decir
a dedo.
Algo
muy parecido sucedió con los colegios emblemáticos (Melitón Carvajal y Pedro
Labarthe) donde se han encontrado serias deficiencias en la infraestructura.
Asimismo, los costos de la remodelación en ambos centros educativos aumentaron
adrede y significativamente en comparación con el presupuesto inicial, igual
hicieron con el terreno de la PCM.
Es
necesario que se haga el levantamiento del secreto bancario, tributario,
bursátil y de las comunicaciones de los exfuncionarios apristas. Debemos
descubrir el camino por el que la plata llega sola a manos de los corruptos.
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