EDITORIAL

Semana del 1º al 8 de Abril de 2014

El mundo sigue sintiendo los tambores de guerra… una guerra fría que volvió a encenderse y todo

porque EEUU no admite que otra potencia copie sus métodos de expansión. Y es que Rusia no ha hecho otra cosa que repetir lo que el imperio viene desarrollando como política desde hace más de 200 años.

La opinión pública,

compuesta por mucha gente que quisiera volver al equilibrio bipolar, que significó la existencia de la otrora URSS, y que posibilitó ciertas mejoras sociales en el mundo occidental, celebra el resurgimiento de Rusia como potencia. Los reaccionarios de siempre, al servicio del imperio yanqui, como los cubanos de Miami, piden absurdos como la inmediata confrontación militar,  o las ya clásicas sanciones económicas.

Obama, parte de esos últimos, planteó en un principio la sanción al país, para luego reducir su amenaza contra quienes hubieran apoyado “la dictadura”. Se refieren al depuesto presidente Viktor Yanukovich, elegido democráticamente y depuesto por una turba compuesta por facciones neonazis con sicarios directamente pagados por EEUU que actuaron, como en Venezuela, como motivadores para lograr la suficiente presión popular para llevar a cabo un golpe de Estado pro OTAN.

Lo que aun no está presente

es el verdadero sentir de los trabajadores ucranianos que, se sabe tienen instituciones sindicales que no concuerdan ni con las facciones fascistas, ni con loc pro OTAN, pero tampoco con Putin. Es por ese frente que camina la historia. Estaremos atentos.

En el Perú, 
los nervios están haciendo temblar al Apra y a sus ayayeros, conforme se acerca el debate en el Pleno del Congreso acerca del informe de la Megacomisión que preside Sergio Tejada. Alan García, alias el Panzón, fiel a sus sucios manejos, no ha dudado en pretender embarrar a Tejada, “destapando” una supuesta denuncia acerca de paternidad irresponsable contra Sergio Tejada por tener una hija no reconocida.

Pero en las redes

han trascendido serias denuncias de cuando joven, el Búfalo Alan García se dedicaba a violar a las hijas de los viejos líderes del Apra, como ha hecho público Prensa Libre que se atrevió a destacarlas y que han sido ampliamente difundidas, aunque, cuando no, en los medios aprofujimoristas, como los del grupo El Comercio, se han callado en 4 idiomas. Cosa que no hubieran hecho si el implicado hubiese sido alguien de izquierda o el propio Humala, a quien, como cortina de humo, y usando al impresentable alanista Yehude Simon, le encargaron soltar la “bomba” de un presunto hijo extramatrimonial de Humala. Una bomba que le reventó en las manos.

Así está la política burguesa en el Perú. Llena de podredumbre pero también de sangre.

El asesinato de Ezequiel Nolasco,

ex funcionario del gobierno regional de Ancash, merece ser seguido con suma atención porque estaríamos asistiendo al inicio de lo que puede llegar a convertirse en una nueva forma de hacer política: usar el sicariato para eliminar enemigos políticos. Esto quiere decir que además de enfrentar a las fuerzas represivas del sistema capitalista que hace alardes de que su Estado tiene el monopolio de la violencia armada sin admitir contendores, las fuerzas sociales corren el riesgo de tener que enfrentar a sicarios con licencia para matar. Estemos advertidos.

Economía

Recomendamos la lectura a fondo del artículo de Erick Toussaint, que muestra como la Banca y corporaciones financieras, se han convertido en un Estado mundial. Con tal de acumular mayores riquezas, tales instituciones mafiosas, acaparan artículos de primera necesidad "commodities", para crear encarecimientos artificiales que alejan a los más pobres de las fuentes de sustento biológico, con ello, aumentan las cotizaciones de la Bolsa de Valores, con lo que sus ganancias aumentan considerablemente. Esta mafiosa manipulación ya ha creado conflictos interburgueses, como la denuncia por parte de Coca Cola contra la corporación financiera Golman Sachs que al haber acaparado el aluminio, incrementó los precios de este mineral afectando la fabricación de las latas de gaseosas que usan este mineral. Bajo el neocapitalismo, los Estados nacionales están prohibidos de intervenir en la economía, en tanto la Banca tiene las manos libres para acumular en perjuicio de los ciudadanos del mundo.