Por Manuel Cunza
Y que no nos digan
los Pex de otros países que no comparten intereses con OFENSIVA PEX. Al parecer,
con una gestión mancomunada, han logrado que la Comisión de Relaciones
Exteriores del Congreso, presidida por el congresista Hildebrando Tapia ha
aprobado un dictamen por el que se crea el Distrito Electoral, para peruanos
residentes fuera del país. Este dictamen, aprobado por unanimidad, será
presentado próximamente al pleno del Congreso para su análisis y aprobación, que
tendrá efectos en la siguiente elección de nuevos congresistas de la República.
Para éste efecto,
será necesaria la modificación del Art. 21 de la ley orgánica de elecciones,
dividiendo el territorio electoral en 27 distritos electorales creando cuatro
escaños parlamentarios. No dicen en el dictamen, cuales son las razones
valederas que justifiquen tal dictamen. ¿Han realizado
alguna vez, una consulta a los peruanos en el extranjero? ¿Si desearamos ser
representados en el Congreso cuales serian, las ventajas o beneficios, para los
que vivimos fuera de nuestro territorio? Esa Comisión, que tiene aprobado un
dictamen, ¿ha propuesto siquiera un referéndum, para saber de los problemas que
aquejan a los peruanos en el extranjero? Y ¿de qué manera se pretende
solucionar esos problemas? ¿Con tan solo elegir un parlamentario que nos
represente?
A este respecto, hemos publicado hasta cuatro
notas, pidiendo, exigiendo a sus promotores (son sólo unos cuantos los
interesados) que sean capaces de debatir en la comunidad peruana en el
exterior, con la finalidad de identificar un solo problema en concreto, cuya
solución, no pueda darse a través de los consulados con solo cumplir las normas
de Cancillería. Que esos promotores nos digan: cuánto le costaría al estado peruano esos cuatro
parlamentarios (otros dicen que debieran ser seis) que ni siquiera están
conscientes de lo que necesitamos. Otro, ¿cuál sería el lugar de residencia: Lima? Entonces,
para que tener un parlamentario de la comunidad en el extranjero fuera del Perú.
En caso contrario, si va a vivir fuera del Perú ¿como haría ese congresista para
representarnos a miles de kilómetros del Congreso? ¿Por control remoto?
El compatriota Aldo Beretta, en un magnifico Artículo al respecto, nos dice que el pésimo servicio de los consulados se
genera por el abandono de estos (consulados) por parte de la Cancillería, lo
que permite a los cónsules pasar por alto las normas que la Ley les obliga (como
sucede en N.J.). Por tanto, la solución a muchos de los problemas de los
peruanos en el exterior se solucionaría con solo cumplir el reglamento
consular. Dice además el Sr. Beretta que los problemas de los consulados se
acercan ya a los 60 años, se cambian los ministros de Relaciones exteriores y
en los consulados no pasa nada.
Estas son las preguntas en que coincidimos con el
compatriota Beretta: ¿para qué queremos los peruanos en el extranjero, un
representante parlamentario? ¿Para qué nos defienda de qué? ¿Se han realizado
encuestas oficiales para saber la opinión de la Comunidad? ¿Se han tomado en cuenta las falsas encuestas de algunos
promotores? ¿Cuántas personas han firmado la solicitud de creación del distrito
electoral Nº 27? ¿Sabe el Sr. Tapia, presidente de la Comisión, cuánto dinero
del pueblo se gastará inútilmente? Se habla de las experiencias de Colombia y Ecuador; ¿ellos,
han solucionado por ejemplo, el problema de sus indocumentados?.
Desde que surgen cabezas visibles de los
parlamentarios, que no representan ni el 2 porciento de nuestra comunidad
migrante, nuestra posición fue de rechazo, propugnando más bien el concepto de repotenciar
los consulados para que, además de cumplir con sus propias normas, se pueda y
deba crearse, la oficina de asesoramiento legal gratuito; incrementar los
fondos de ayuda humanitaria para convertirlos en fondos de asistencia social;
crear la oficina consular de promoción comercial; otorgarle mayores
prerrogativas a los Consejos de Consulta, para la fiscalización efectiva de los
actos consulares; desterrar definitivamente el favoritismo y la discriminación
en los consulados, con la permanente fiscalización, por parte de la
cancillería, en las embajadas y consulados del Perú en el mundo.
Además de lo expuesto, se otorgue a las
instituciones organizadas de peruanos en el exterior la vinculación para
denunciar y solicitar el inmediato cambio de un cónsul, cuando éste transgreda una norma consular o deriven sus acciones hacia actos en
desmedro de los intereses de la comunidad. Todo lo dicho, para repotenciar los
consulados, podrían resolver los problemas mas apremiantes de los peruanos en
el exterior, sin recurrir al millonario costo que significaría unos inútiles
representantes en el parlamento, los que hoy dicen ser nuestros representantes,
a quienes conocemos solo por sus demagógicas propuestas ya como autoproclamados
candidatos. Menos mal que estos son contados con los dedos de una mano algunos
de los cuales son conocidos como carentes de moral.
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