domingo, 26 de enero de 2014

Debate sobre el TPP

De izquierda a derecha: Carlos Salamanca, Malú Huacuja del Toro, Carlos Bernales y Adam Weissman

Resumen de la exposición de Carlos Bernales (Cabe), en nombre de Peruanos en Acción NY y Prensa Libre, en el evento organizado por Trade Justice, Volunteer of Global Justice, Occupy Wall Street, Terraza 7, entre otras organizaciones. Junto con Cabe, hicieron uso de la palabra Malú Huacuja del Toro, mexicana y activista contra los tratados de libre comercio y Carlos Salamanca, colombiano, militante del Foro Democrático Alternativo, NY.

Luego de agradecer a los organizadores y en especial a Freddy Castiblanco quien con talento y dedicación ha hecho del Terrazas un “territorio Libre en América”, pasaré a señalar que yo si me siento complacido por el TPP. Se preguntarán porqué. Y es que, al meno,s ha tenido la virtud de despertar nuestra curiosidad, eso que en España se llama cotilleo, en Perú chismografía y de seguro en cada país se le nombra de manera diferente, porque la curiosidad tiene muchas almas.
Porque la curiosidad al TPP nos motiva hoy a reunirnos. Esa curiosidad que nos empuja muchas veces a mirar por el ojo de la cerradura. Precisamente, porque algo malo se debe estar tramando contra nuestros pueblos. Porque el TPP está rodeado de misterios y prohibiciones y lo trascendido, gracias a Wikileaks, es tan perverso que horroriza imaginarnos lo que no se nos muestra.
Ya se ha expresado entre nosotros, las consecuencias de estos tratados que, como bien ha destacado, Malú Huajuca del Toro y que seguro abundará mi amigo Carlos Salamanca, son terribles en cuanto se refiere al uso de un concepto aparentemente inofensivo, la “propiedad intelectual”, pero que en manos de criminales y sicarios de la sacrosanta “propiedad privada” se vuelve un arma de destrucción masiva, porque ese concepto amenaza con impedir que los medicamentos genéricos sigan en el mercado por el delito de ser más baratos que aquellos que se ofrecen orondos con una marca llena de símbolos del dólar.
Otro punto que ya tocó el compañero Castiblanco, se refiere a los abusos legales que estos tratados de libre comercio han generado. En el caso peruano, el Estado de este país empobrecido por la colonialidad del poder, se encuentra amenazado por demandas legales que ya suman 6,000 millones de dólares, 6 billones en inglés, en la que por ejemplo Doe Run, la empresa minera que ha convertido la región donde opera, en uno de los lugares más contaminados del mundo, encabeza una demanda por 800 millones de dólares contra el Estado que le exige que cumpla con leyes ambientales, para evitar una mayor contaminación. Ese es el delito del Estado peruano, pedirle a los criminales de Doe Run que no siga asesinando niños y pobladores en general usando sistemas que envenenan el medio ambiente.
Y no es que el Estado peruano sea un ejemplo de lucha a favor de los intereses del pueblo, sino que, esta vez excepcionalmente, responde inevitablemente a la movilización de seres humanos que ya les da lo mismo morir contaminados o por las asesinas balas de la policía. Dicho sea de paso, el Estado peruano acaba de aprobar una ley que concede impunidad a policías y efectivos del ejército que usen sus armas contra el pueblo
Pero no persistiré en cosas que ya sabemos, sino enfatizar el contexto en que nos encontramos. Porque sería un error luchar únicamente contra el TPP, que no digo que no haya que hacerlo, sino que hay que mirar mas allá, a la mano criminal que exige este tratado y que es la misma que está destruyendo el planeta y amenaza con la extinción de la especie humana, y animal en general, que puebla el planeta.
Tenemos que señalar al enemigo, ese 1% que señalan con dedo acusador los compañeros de Occupy Wall Street. Son los capitalistas, los dueños de las corporaciones, unos personajes dementes, quienes enloquecidos por su afán de tener más riquezas y poder quienes están llevando adelante esta sicopatía criminal.
¿Como llegaron a ser el 1% de la población? Nancy Birdsall, que no es comunista ni socialista, ni alguien a quien medianamente pudiéramos calificar de progresista, hizo un estudio acerca de la evolución del producto mundial bruto (PMB), en los 200 últimos años.
Como nos recuerda Birdsall, para 1800, el capitalismo se había ya implantado en Europa y daba pasos firmes en la globalización. Para entonces la humanidad estaba constituida por 900 millones de personas, que se repartían el PMB de la siguiente manera 53%, aproximadamente, para el 80% de la población y 37% para el 20% de la población rica. Esa distribución era injusta entonces, pero veamos lo que pasó en 200 años. Para el 2000 la población, ha crecido 6 veces desde el año 1800, el 20% de se ha apropiado del 80% del PMB, que ha crecido cerca de 20 veces, y el 80% de la población ahora accede a solo el 20%.
Esto desnuda la verdadera naturaleza del capitalismo que, para 1800, nos ofrecía Libertad, Igualdad y Fraternidad. Mintió, miente y sigue mintiendo y para no hacer mas evidente sus mentiras, hoy acude al ocultamiento de sus intenciones y por eso conspira en secreto el TPP, contra las necesidades de bienestar de nuestros pueblos.
Por eso hacemos bien en reunirnos aquí, para despertar de esta pesadilla y empezar a actuar. Porque la única manera de evitar que los capitalistas sigan adelante en su caminata de sangre, muerte y terror que aterra al planeta entero.
Porque ha llegado el momento de soñar despiertos, porque necesitamos urgentemente saber el color de la luz al final del túnel, es que debemos darle contenido a la esperanza de otro mundo posible, porque no importa el nombre que se le de al futuro diferente, que para mí se llama socialismo, lo importante es ponernos de acuerdo para no andar a ciegas y tener una dirección para nuestros destinos y lograr el mundo nuevo que queremos.


Muchas gracias

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