YA NO HAY NADA QUE OCULTAR

Por Manuel Cunza Garcia

Solo los cobardes

Guardan silencio

                Anónimo

A no dudarlo, las próximas elecciones en la Peruvian Parade Inc, institución que creemos de todos los peruanos, será una contienda abiertamente política entre dos tendencias, una de las cuales ostenta el poder institucional. Ninguno de los aludidos es la representación ideológica de la comunidad peruana de residentes en el Estado de New Jersey. Ninguna de las tendencias en pugna, tiene nada que ofrecer a los peruanos, los realmente dueños de la institución. Uno exhibe el certificado de las promesas institucionales incumplidas; el otro no es más que la acción del oportunismo, que se mueve al son del dinero que este grupo político exhibe.

Las próximas elecciones en Peruvian Parade Inc. han tenido ya la virtud de evidenciar algunas definiciones. Al quitarse la careta un par de fideicomisarios, que se encontraban agazapados en ese organismo (Junta de Fideicomisarios), a la espera de un momento oportuno para hacer gala de facilidades económicas, iniciaron la compra de votos, para luego querer imponer su inscripción como votantes.

Felizmente, la Asamblea General del domingo 17, le puso el freno a esos despropósitos promovidos por el señor V. Huamán, resultando el primer fracaso del fujimorismo. El otro, es el engreído del actual presidente, un expulsado ex–presidente acostumbrado a dar pasitos al frente, de manera muy sucia, cada vez que suenan los cantantes y sonantes. Fue este quien apoyó que se pretenda inscribir a 180 compatriotas con derecho a voto, por quienes alguien pagó la cuota de inscripción respectiva, $1800.00 en total, violentando lo que debiera ser un acto personal voluntario y no por encargo (compra de votos).

Definitivamente, la pugna electoral se dará, entre una facción del aprismo, frente al fujimorismo que solo evidencia suficiente holgura monetaria para manejar organizaciones fantasmas y a personajes sin respaldo en nuestra comunidad.

De modo que ya no hay nada que ocultar: las cartas están echadas, el preciado botín, es la directiva de la institución con proyección a las elecciones generales en el Perú en el año 2016. Con ese fin, no se escatimarán esfuerzos ni métodos, de un lado o del otro, tal como los operadores del fujimorismo han planteado, segñú uno de sus representantes que en rueda de amigos se ha atrevido a amenazar con interferir toda gestión que haga la institución, supuestamente, de eso se encargarian los operadores, aunque el jefe fujimorista de la alta dirección brilla por su ausencia ¿Por qué?

Tenemos que reconocer sí, que la actual Junta directiva, organizó y ejecutó, dos años de parada fuera de lo común, que me permití llamarlos históricos. Pero no todo tiene que ser parada (desfile peruano). Por lo tanto, debemos deplorar que la Junta Directiva que pretende la reelección, lo hace quizá con la misma plataforma electoral. Por nuestra parte, tenemos que poner en la mesa, el no haber cumplido con su promesa electoral, en el que se esperaba el inicio de la organización CASA PERU, la elaboración de los nuevos estatutos, la redacción de un nuevo Reglamento Electoral y algo que fuera a beneficiar a la comunidad peruana.

El retiro al otro bando que hace el inmoral ex–presidente (2004-2005) debe significar también, el retiro de su inseparable amigo tramitador, de nacionalidad chilena, Sr. Aguirre, quien representa un peligro a la estabilidad institucionalidad, ya que el vinculo que los une lo haría actuar en igual forma que el ex–presidente Jóse Moore. Personas que puedan hacer la labor de esos agentes, existen en la institución que, además, lo haría con más transparencia, sin exigir que se les otorgue el pergamino de asesor, con voz y voto en la Junta Directiva. Lo que sí, llama la atención, la elección como Fideicomisario de la actual secretaria general, a quien prefiere un extranjero (chileno) que a un peruano en el seno de la institución. Los reeleccionistas justifican esa elección como la intención de copar los dos estamentos de dirección de PP. (Junta Directiva y Junta de Fideicomisarios).

No planteamos oposición a la reelección de la mayoría de los actuales directivos. Tampoco aceptamos en la Peruvian Parade, la mano manchada de un candidato, como producto del acomodo político y el oportunismo electoral. Por eso nos aferramos al sabio refrán que dice: “más vale un viejo conocido, que cientos por conocer”. También es inocultable, que los intereses de los reeleccionistas, al cercarse el 2016, es ofrecer en bandeja de plata la Parada Peruana al que quiera emular a un Alan García, con sus faenones y sus narco-indultos. Repetimos, ya nada puede ocultarse, sería hipócrita hacerlo. Aunque sabemos, que se luchará con todas las artimañas posibles, para someter al hasta hoy Chúcaro PP al dominio del caduco aprismo o al corrupto fujimontesinismo.